Love one another | Amándonos unos a otros
Maureen Cammack

Love for one another is accepting each other for who we are and not what we do. We feel love for one another but, also we must choose to love because it isn’t always easy. It is living 1 Corinthians 13 out in our relationships with others by being patient, kind, and putting the needs of others above our own. 

Loving one another isn’t insisting on our own way, nor keeping track of the wrongs that have been done. It isn’t expecting perfection from one another when we live in a fallen world, but rather giving grace to each other when we don’t get things quite right. 

Loving one another takes risk and being vulnerable. If you disagree with each other, you do not disengage; you choose the relationship rather than being right. 

It is showing up in each other’s lives not just when things are going well, but walking alongside in difficult times too. It is being real and transparent, not telling the other what we think they want to hear but rather sharing the truth in love. Most importantly, realizing loving one another goes beyond what we ourselves are fully capable of and asking the Lord to work through us to bring Him Glory. We serve a relational God who has given what we need to be relational people.


Amarnos unos a otros es aceptarnos por lo que somos y no por lo que hacemos. Sentimos amor el uno por el otro, pero también debemos elegir amar porque no siempre es fácil. Es vivir 1 Corintios 13 en nuestras relaciones con los demás siendo pacientes, amables y poniendo las necesidades de los demás por encima de las nuestras.

Amarnos los unos a los otros no es insistir en nuestro propio camino, ni hacer un seguimiento de los males que se han cometido. No se trata de esperar la perfección unos de otros cuando vivimos en un mundo caído, sino más bien tener gracia unos con otros cuando no hacemos las cosas del todo bien.

Amarse los unos a los otros conlleva riesgos y debemos ser vulnerables. Si no están de acuerdo, no se aparten uno del otro más bien elige la relación en lugar de tener la razón.

Es estar presente en la vida de los demás no solo cuando las cosas van bien, sino también en los momentos difíciles. Es ser real y transparente, no decirle al otro lo que creemos que quiere escuchar, sino compartir la verdad en amor. Más importante aún, darnos cuenta que amarnos unos a otros va más allá de lo que nosotros mismos somos completamente capaces de hacer, mas bien pidamos al Señor que trabaje a través de nosotros para traerle gloria. Servimos a un Dios que se relaciona con nosotros y que nos ha dado lo que necesitamos para ser personas que se relacionan con otros.